domingo, 15 de marzo de 2020

¿Todo es estrategia?


¿Todo es estrategia?

- Perdona, profe. ¿Es necesario que las impros tengan un protagonista claro, que el prol esté súper definido, que haya cambios de escena y avances de sucesiones impecables y todo este coñazo? He visto impros donde no hacen todo eso.

- A ver… ¿Qué quieres conseguir con tu impro?

- No sé.

- ¿No lo sabes?

- No… Yo hago lo que me dices.

- ¿Y qué es lo que hace que sientas que la impro funciona?

- No sé…

- Dicho de otro modo ¿qué crees que es lo peor que le podría pasar a una impro?

- No sé… Que no tenga sentido. Que no vaya a ninguna parte.

- ¿Por qué?

- Porque nadie la entendería, el público no pillaría nada.

- Entonces ¿quieres que el público la entienda?

- Sí.

- Pues dale un protagonista claro, un prol súper definido, cambios de escena y sucesiones impecables.

- Pero…

- NI PERO NI POLLAS HIJO DE PUTA. Jeje, es broma. Eh oye, que es broma. Venga no te pongas así. No te vayas, no puedes salir de clase. Oh, señor director… buenas. No, llora porque se ha caído y… ¿A su despacho? Oiga, sólo era una broma… Déjeme que me explique. Suélteme, por favor. ¿El arma? Sólo la llevo por si… No se ponga histérico, no es necesario que llame a la policía. Soy un buen profesor, lo juro. Suéltenme. ¡Suéltenme, les digo! ¡Recibirán noticias de mi abogado!

Diez años más tarde.

- No está tan mal, Jason. Nos dan de comer tres veces al día y me dejan salir 2 horas al patio a hacer ejercicio. Ah, y me he hecho amigo de uno de los guardias, a veces me pasa papel higiénico extra. Pero este mono naranja me roza los muslos, jeje. Me alegro que vengas a verme después de 6 años aunque tenga que verte a través de este cristal. Veo que has seguido estudiando impro, te he visto por la tele en varios festivales.

- Sí, profe. Sólo he venido a preguntarle: ¿es necesario tanta estrategia para que sus lecciones se dilaten 6 años en el tiempo y acaben con usted en prisión?

- ¡¡ESTO ES UN PROL DEFINIDO, HIJO DE PUTA!!



domingo, 1 de marzo de 2020

La Arquitrama


La Arquitrama

Antes de seguir, el señor Robert McKee me ha enseñado una cosilla que tengo que poner como baliza en este blog, porque voy a usar mucho ese término.

En su libro El Guión, que posiblemente he mencionado ya alguna vez, diferencia entre Minitrama, Antitrama y Arquitrama de historia. Me centro en la Arquitrama esta vez y os dejo las otras dos como cliffhanger para que no baje audiencia.

Queremos que nuestras vidas tengan sentido. Queremos pensar que somos el protagonista de nuestra línea temporal. Queremos pensar que lo que nos ocurre, nos forma. Los accidentes nos hacen aprender, los malos reciben su merecido y los buenos siempre somos nosotros. Las personas de nuestra vida son aliados y nos ayudan en nuestras empresas. Cuando todo está perdido, las fuerzas opositoras le dan la vuelta a la situación y nos hacen ganar, haciéndonos ver que somos capaces. Y cuando superamos la prueba, obtenemos la redención a nuestros errores, conseguimos ser mejores que nosotros mismos. Queremos ser los personajes principales de la película de nuestra vida.

Nuestro cerebro ordena las historias de esta forma porque necesita controlar y entender nuestro pasado para darnos armas para el presente. Necesita estructurar de una forma eficaz la compleja y a veces incoherente estructura de causalidades y casualidades que es nuestra vida. Necesitamos las historias para enmarcar nuestras circunstancias y agarrarnos a ellas para pensar que todo tiene sentido. Eso es la Arquitrama.

Ahora bien, la realidad a menudo tiene otros planes… Ya os contaré.


Con la foto pretendo exponer el principio de enfrentamiento con sentido de una arquitrama clásica. Un personaje definido quiere conseguir algo concreto. Me parece que queda universalmente claro.

Ah, dando un último latigazo de impro-opinión, diré que necesitamos que las improvisaciones sean arquitramas para empatizar con esa habilidad innata que tienen los cerebros del público, esta es: entender la sucesión de experiencias vitales como un viaje con sentido.