jueves, 15 de junio de 2023

Vuelta a la expansión horizontal

 

Vuelta a la expansión horizontal

Os quiero hablar de un momento epifanía que tuvo lugar en una muestra del año pasado.

Alumnos con 1 solo curso de experiencia que se enfrentaban a un formato long form que creé expresamente para representarse aquel día. Llevábamos ya semanas practicando las impros a 4 o 5 en escena, todo genial. Días mejores, días más duros. Pero comprendieron bien lo que se pedía en una long form y estaban preparados para hacer algo muy digno.

Empieza la impro, estilo cine noir, inspectores, policías, mafiosos, bares… Evidentemente, alumnos sin demasiada experiencia así que se percibía una alerta extra, una rigidez que respondía a tener un público presente. Nada grave, forma parte del proceso y siempre les digo que es necesario pasar por eso para alcanzar el nivel óptimo de espontaneidad que la impro requiere.

En un momento dado, se instaló un espacio tipo comisaría. Previamente se había hablado de aquella comisaria, un lugar sucio y dejado con un comisario descrito como “un gilipollas”.

Cambio de escena, vamos a esa comisaría. La propia indeterminación de aquel espacio, pero al mismo tiempo la idea acertada del mismo, les permitió desarrollar a continuación una expansión horizontal que, al no requerir un empuje hacia arriba de trama, les dejó espacio para disfrutar un momento verdaderamente hilarante en el que no pasó nada que tuviera que ver con trama, y fue genial.

El comisario lanzando botellas de wiski contra las paredes sucias, policías que trataban de ayudar a su jefe siendo completos inútiles, todo absolutamente decadente y desastroso. Exquisito. Entra el protagonista, el inspector. Diálogo de expansión entre ellos dos, manteniendo el personaje y aparcando por momentos la trama. Público descojonándose. Fue una expansión en horizontal de manual.

Me refrescó ese concepto. A veces hace falta dejar la trama a un lado, hace el simple ejercicio de recordar lo que se ha dicho, y disfrutar de las tonterías que amplían la historia. Al final, si este artículo lo dedico a algo, no es a la trama que se explicó, que ni siquiera recuerdo ya. Es a ese momento especial en el que no pasaba nada, y pasaba de todo.

Expandid más vuestras impros en horizontal.

 


jueves, 1 de junio de 2023

¿Hoy cuantos somos?

 

¿Hoy cuantos somos?

Los que habéis improvisado sabéis que el número de intérpretes en escena es un valor a tener muy en cuenta a la hora de afrontar un espectáculo. ¿Lo habési hablado alguna vez?

Hemos tenido este verano varias actuaciones en las que de repente fuimos 4 o 5 en escena, acostumbrados a ser 2.

De entrada, para mi el número perfecto es 3. 2 instalan, y si presentan un tercero, éste ha escuchado todo y entra con propuesta acertada. No hay opción ni tampoco prisa o estrategia de que no se pisen héroe + villano, enamorados o personajes complementarios. Pero a partir de 5 intervienen para mí nuevos factores que pueden jugarte muy a favor si los subrayas antes de empezar la actuación, o muy en contra si entras en modo 3 siendo 5.

Es la corporalidad, el apoyo visual de la escena. Las tramas de 5 improvisadores requieren coralidad. Personajes al mismo nivel que juegan a eso mismo, a que son varios representando 1. No hablo de 1 solo personaje literal, sino 1 solo rol de personaje, un solo arquetipo. Por ejemplo pareja de gemelos como protagonistas, o los vecinos indignados de un bloque de pisos, o una banda de gatos músicos en un callejón. Lo que sea, pero en grupo.

Aquí interviene también la corporalidad. Buscar foco bonito, construir cuadros interesantes… La trama pasa a compartir podio con lo visual del espectáculo, la escucha se multiplica y el silencio y la escucha aumentan de 1% en un show a 2 improvisadores, hasta un 80% en un show de 5. En pocas palabras: es más importante saber cuándo NO salir.

Resumen de tips para aquellos que actuéis a 5 o más en escena:

1-      Los protas compartidos van juntos toda la impro. Alerta si se separan.

2-      Si no hablas durante 10 minutos seguidos, no pasa nada. Estás ayudando.

3-      Atrévete a salir a representar un objeto. Es visual, gracioso, y abres posibilidades para tus compañeros.

4-      Las voces en off no se disimulan. Úsalas con todo el morro sin salir a escena.

5-      Si coincidís varios en escena, trata de explicar lo máximo que puedas hablando lo mínimo que puedas.

6-      Cuidado con el reparto de roles. Tener muchos personajes concretos no necesariamente ayuda si no tenemos muy presente el punto 2.