sábado, 1 de junio de 2019

Improboratorio II - Desde el tejado


Desde el tejado del Improboratorio


- Dios mío, Profesor Strauss. Qué miedo. Estamos a mucha altura. ¿Por qué me ha citado en el tejado del Improboratorio?

- Ah, Señor Scoffermayer. Estoy arreglando unos asuntillos de Personaje en la torre Actor. Páseme esa propuesta física, cojones.

- Vale, aquí tiene… ¿No usa usted cinturones, casco o medidas de seguridad, Profesor Strauss?

- Señor Scoffermayer no sea usted idiota, esto es el Improboratorio. Cualquier medida de seguridad va en detrimento de la pureza de la inmediatez. ¿Es que aún no lo ha entendido? Lleva ya unos cinco meses en el Improboratorio, joder.

- Supongo que tiene razón. Pero dígame, ¿Por qué me ha citado en la torre Actor?

- Es el único sitio desde donde se alcanza a ver un lugar muy especial que hay a la frontera de los dominios del Improboratorio. Mire. ¿Ve aquel valle con tres picos, y la entrada de un túnel en la falda de las montañas?

- Lo veo. Por allí discurre la carretera principal de la Interpretación. Por allí llegué yo al Improboratorio.

- Así es. Esos tres picos son los que nos separan de la gran capital del teatro, Interpretación City. El más alto es el Monte Actor. El tejado de la Torre Actor del Improboratorio se asemeja mucho a él, su estructura es la misma para inspirar el funcionamiento práctico de mis experimentos, tienen mucho en común. El Monte Actor permite a los exploradores ser conscientes de su espacio inmediato, de la ubicación escénica real, de lo que pasa a su alrededor. Páseme ahora esa propuesta de voz, demonios.

- Sí, aquí tiene. Pero Profesor Strauss, en Interpretación City me dijeron que uno se olvida de quién es cuando está en escena. ¿Significa eso que Monte Actor queda atrás cuando actuamos?

- ¿Quiere mi opinión? Eso son gilipolleces. Uno nunca se olvida de quien es, Señor Scoffermayer. ¿Acaso Hamlet llevaba micro, o vivía bajo focos? Hay una presencia escénica que depende de la mente consciente, de saber quién coño es usted en realidad. Nadie olvida lo que es su propio cerebro, es ridículo joder.

- Vale, no se moleste Profesor Strauss…

- El segundo monte en tamaño es el Monte Personaje. Ahí sí, señor Scoffermayer. Ahí olvídese de quién es usted y de quién es su abuela Fernanda. Ahí solo hay lugar para los pensamientos, decisiones, sentimientos, instintos de su puto personaje. Me importa una mierda cual haya sido su formación, allí usted se convierte en otra cosa. Eso es interpretar. La Torre Actor del Improboratorio incluye muchos elementos parecidos, también. Y esos dos montes forman parte de la jurisdicción de Interpretación City.

- Entonces… ¿El tercer monte no forma parte de la interpretación, Profesor Strauss?

- No, Señor Scoffermayer. El tercero… Es otra cosa. Ese monte es solo nuestro. Ese es el Monte Creación. En los dominios del Improboratorio no vale con ser Actor y Personaje, necesita usted dividirse de forma virtuosa y complicada en un tercer ente mental, pues lo que sucede en nuestros dominios no ha sido pactado, ensayado ni decidido previamente, como hacen esos pijos de Interpretación City. Es usted actor, personaje y creador al mismo tiempo. ¿Qué le parece?

- Complicado...

- Lo es, coño. Es jodidamente difícil. Ahá, ya está. Arreglado.

- ¿El qué?

- Había una fuga en la tubería de decencia de mi personaje y no conseguía instalarme con suficiente decoro, por eso le he citado aquí. Disculpe si he sido malhablado esta mañana, pero creo que está arreglado.

- No se preocupe, puto imbécil de los cojones.

- Ups.


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